Botellas forradas simil cuero

Las botellas forradas son un elemento decorativo impactante, que logran realzar cualquier rincón. Además, pueden ser utilizadas como contenedores de bebidas, y también como bases para lámparas. Hoy aprenderemos a forrar botellas, imitando cuero, con pocos materiales y gran sencillez.

Pasos para forrar una botella


Necesitaremos una botella de vidrio de la forma que más nos guste, aunque también podría ser una botella plástica u otro recipiente. Limpiamos la botella, eliminando cualquier etiqueta, adhesivo y suciedad (si fuese de plástico, lijamos levemente para crear una mejor superficie adherente).


Comenzamos entonces por cortar, a mano, trocitos de papel de diario, los cuales adherimos a la botella con la ayuda de un buen pegamento universal. Cubrimos por completo el vidrio, aunque queden pedacitos de papel sueltos. Estos serán adheridos luego, en el siguiente paso. Lo importante es que todo el vidrio posea papel adherido al menos con un punto de pegamento.

Luego, cortamos a mano trozos de papel tissue o papel higiénico. Debemos cortar a mano, para que las fibras queden expuestas, logrando una mejor adherencia del papel entre sí. Con la ayuda de una esponja, humedecemos el diario adherido con solución endurecedora (una parte de cola, una y media a dos de agua), y vamos apoyando los trocitos de papel higiénico, hasta cubrir en su totalidad. Repetiremos el procedimiento hasta obtener tres capas de papel blanco, dejando secar bien entre una y otra capa. Podemos reemplazar la solución endurecedora por engrudo casero, aplicado con un pincel suave.

Ya podremos apreciar que este forro ha tomado la forma del cuero. Para dar color, podemos utilizar pinturas acrílicas en tonos marrones y beige (si queremos cuero de este color, también puede ser pintura negra con tonos rojos o violetas para elevar el color), o bien con cera en pasta coloreada con acrílico, o también con diversas pomadas para zapatos. Aplicamos con un paño, dejamos secar unos minutos y luego frotamos suavemente, para obtener brillo. Si hubiésemos utilizado pinturas, al secarse bien aplicamos una capa de cera incolora, y luego lustramos para obtener brillo.

Podemos dar los toques finales con pinturas (imitando puntadas de costura), o con sogas finas, para dar una buena terminación. Si la botella fuera a ser luego utilizada para contener bebidas, reemplazamos la cera por barniz, para proteger e impermeabilizar más efectivamente los materiales.

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